Queridos compañeros, colegas y especialmente, amigos:
Un año más, y van ya XXXII ediciones, la Asociación Andaluza del Dolor
organiza su tradicional congreso autonómico. El congreso anual es la principal
acción científica que caracteriza a las asociaciones científicas y por ello,
salvo causa de fuerza mayor, como fue la pandemia COVID en 2020, debemos hacer
el máximo esfuerzo para, no solamente celebrarlo, sino darle la máxima calidad,
la altura científica y la incorporación de todas las novedades habidas en los
últimos meses.
Y este año nos vamos a Granada. Esta preciosa ciudad sita en Andalucía oriental
encastrada a horcajadas entre Málaga, Jaén, Córdoba, Almería y sitiada por el
norte por la Comunidad Murciana, siempre ha sido crisol de culturas y cuna de
la ciencia, sin olvidar su larga tradición humanista y literaria. Ciudad única
que mientras sientes el frescor de su Sierra Nevada y el rumor de sus aguas
ocultas puedes acariciar las suaves olas de su costa tropical.
Ciudad monumental y pluricultural.
Como decía Ernest Hemingway “Si tuviéramos que visitar una sola
ciudad en España, esa debería ser Granada”.
Si bien en el terreno de la ciencia es de las ciudades más avanzadas,
no olvidemos que, en la historia de la medicina, durante el reino nazarí,
Granada contaba ya con la Madraza, centro de enseñanza superior situado junto a
la Alcaicería, el Mercado de la seda.
Este centro congregó en dicho período a los más notables sabios de la
época.
Destaca entre ellos Ibn-al-jatib que como médico estudió la epidemia de
peste que asoló Granada a mediados del siglo XIV defendiendo la teoría del
contagio y disponía ya de su hospital en pleno S XIV, el Maristán situado en el
Albaicín junto al Darro.
Fundada su Universidad en el siglo XVI siempre contó con los estudios
de medicina que, finalmente, fueron consolidados con la Ley Moyano de 1857,
ubicándose inicialmente en un edificio anexo al hospital de San Juan de Dios.
Si estos antecedentes históricos, culturales y monumentales son
suficientemente atractivos para venir a Granada, a esto se le suma un congreso
moderno, participativo, innovador y didáctico.
¡Os esperamos, Granada y la Asociación Andaluza del Dolor nunca
defraudan!